"Si alguien dijese que el sacrificio de la Misa es solamente de alabanza y de acción de gracias, o una simple conmemoración del sacrificio consumado en la cruz, y que no es un sacrificio propiciatorio, o bien que aprovecha sólo a quien comulga, o que no se debe ofrecer por vivos y difuntos, por los pecados, las penas, las satisfacciones y otras necesidades, sea anatema". Concilio de Trento, Denz. Sch., 1753.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Nota: solo los miembros de este blog pueden publicar comentarios.