“Mire Padre, que la Santísima Virgen, le ha dado una NUEVA EFICACIA a la recitación del Santo Rosario en éstos últimos tiempos que ahora vivimos. Tanta es ésta eficacia que no hay problema alguno, no importando que tan difícil sea, ya sea temporal o sobre todo espiritual, en la vida personal de cada uno de nosotros, de nuestras familias, que no se pueda solucionar con el Rosario. No hay problema alguno, por más difícil que sea, que no se pueda solucionar con la oración del Santo Rosario. Con el Santo Rosario nos salvaremos. Nos santificaremos. Con ello consolaremos a nuestro Señor y obtendríamos la salvación de muchas almas”. Hermana Lucía, entrevista con el Padre Fuentes, 1957.