“Por ser animal sociable, el hombre debe a los demás cuanto sea necesario para la conservación de la sociedad. Ahora bien, es necesario para tal convivencia dar mutuo crédito a las palabras y creer nos dicen la verdad. Y en este sentido adquiere la virtud de veracidad cierta razón de débito”. Santo Tomás de Aquino O.P., Suma Teológica, II-II ae, cuestión 109.