Non nobis, Domine, non nobis, sed nomine tuo da gloriam. Psal 113, 9

sábado, 23 de febrero de 2013

Inmolarnos como hostias

“Para que la oblación, con la cual en este Sacrificio los fieles ofrecen al Padre celestial la víctima divina, alcance su pleno efecto (...) es preciso que se inmolen a sí mismos como hostias (...) y, deseosos de asemejarse a Jesucristo, que sufrió tan acerbos dolores, se ofrezcan como hostia espiritual con el mismo Sumo y eterno Sacerdote y por medio de Él mismo”. Pío XII, Encíclica Mediator Dei, 20-XI-1947, 25.