“No os pido que penséis en Él, ni que saquéis muchos conceptos, ni que hagáis grandes y delicadas consideraciones con vuestro entendimiento; no os pido más que le miréis… Mirad que no está aguardando otra cosa… sino que le miremos. Como le quisiereis le hallaréis”. Santa Teresa de Jesús O.C.D., Camino 26, 3.